El mercado ovino continúa bajo ante una situación marcada por una corta oferta, y la demanda interna se retrae ante los elevados precios alcanzados hasta ahora, pero con una demanda en la exportación muy activa que es la que presiona los precios, aunque a lo largo de esta semana, las repeticiones fueron casi generalizadas.
Además, el mercado continúa muy influenciado por los problemas sanitarios que paralizan las operaciones de compra-venta en varias zonas afectadas por la lengua azul, que limitan el movimiento de animales vivos, recortando, aún más, la oferta.
La falta de animales continúa presionando para aguantar los precios. Se esperaba que la producción fuera recuperándose, pero los animales no están entrando a un ritmo normal este año y sigue sin haber corderos en el campo, según indican fuentes de la Lonja del Ebro.
La falta de animales continúa presionando para aguantar los precios
El consumo interno no está alegre y las ventas de la carne están complicadas en los lineales. También las ventas a Europa están más relajadas, aunque la producción en toda Europa sea escasa, pero los precios alcanzados retraen también el consumo europeo. Lo que sí que sigue funcionando son las exportaciones hacia terceros países, con Argelia y Marruecos demandando animales.
Sin embargo, la Lonja de Binéfar fue la única que anotó subidas en sus precios. Esta subida provoca discrepancias en la mesa del ovino, que finalmente, sube tres céntimos, más para ajustar los precios a la realidad del mercado que porque haya una tendencia claramente alcista. Aunque es cierto que hay muy poca oferta de cordero en campo y el operador que los necesita, debe pagar más por ellos, indican funts de esta lonja
Por un lado, hay movimientos en el mercado, se llenan poco a poco los cebaderos, pero hay poca oferta en campo. Por otro lado, las ventas están muy complicadas, se están ajustando los precios en Europa para competir con otros mercados, las ventas en el mercado nacional están complicadas, más porque nos situamos en la última semana de un mes de octubre muy largo en días.
Al final, nos encontramos con poco cordero en campo pero también con poco consumo, con una horquilla en precios y con una mesa del ovino dividida y a la expectativa de un cambio. Ahora, tendremos qué ver qué sucede con el inicio de noviembre y si los precios se estabilizan definitivamente.
