El pepino es uno de los productos estrella en las ensaladas de verano. Es muy versátil, lo podemos incluir en una crema, en una ensalada, o incluso como aperitivo. María Muñoz Yuste, nutricionista de la Clínica Bmum de Madrid, nos explicó algunos de los beneficios de este producto en la sección `A la salud por la alimentación´.
Beneficios del pepino
1. Bajo en calorías y potente hidratante. Es un aliado de las dietas de adelgazamiento por su bajo contenido calórico Aporta 12kcal/100gr. Y además, tiene un alto contenido en agua, un 97% del pepino es agua, importante en verano para mantener un nivel adecuado de hidratación. Tiene más agua que la sandía (94%)
2. Es un diurético natural. Con el calor, muchas personas sufren retención de líquidos y el pepino es excelente para depurar el organismo y eliminar el exceso de agua por su aporte en potasio.
3. Saciante y beneficioso para la salud digestiva: el pepino aporta fibra, que contribuye a la sensación de saciedad y a regular el tránsito intestinal. Además, contiene una enzima, la erepsina, que ayuda a digerir mejor las proteínas facilitando la digestión y protegiendo la mucosa gástrica.
Se puede consumir a diario, aunque lo más recomendable es variar los alimentos para obtener un equilibrio en la alimentación y una buena diversidad de nuestra microbiota intestinal.
La piel del pepino se puede comer porque contiene grandes cantidades de vitamina K, ideal para fortalecer los huesos, betacarotenos que nos ayudan a proteger la piel del sol, y antioxidantes. Especialmente el pepino ecológico.
Si no nos gusta el sabor, se puede incluir en una ensalada con tomate, maíz, lechuga, atún, aliñada con aceite de oliva virgen, vinagre y orégano.
Ideas para incluir el pepino en nuestra alimentación
1. Deliciosa crema depurativa. Esta crema va muy bien para cuando hemos hecho algún exceso y queremos ayudar a nuestro cuerpo a depurar. (Ejemplo, para cenar un domingo por la noche) . Necesitamos ½ melón, 1 pepino, 1 aguacate, 250ml de leche o bebida vegetal, 1 limón, aceite de oliva y sal. Batir los ingredientes previamente cortados. Añadir la leche, sal y limón y batir de nuevo. ¡Fácil, rápido y listo para tomar!
2. Salsa de pepino. Un yogur griego o kéfir, pepino en cuadraditos y añadir menta, perejil o cilantro, por ejemplo.
3. En crudo: en ensaladas con tomate, rúcula, canónigos o cebolla, pimiento. O en aperitivos como brochetas con tomatitos cherry y queso fresco o salmón.