Con motivo de la publicación en el BOE de más de 1.800 páginas con la revisión de los planes hidrológicos, incluido el Tajo y su caudal ecológico, la emisión de AGROPOPULAR del 11 de febrero se realizó desde Aranjuez, en concreto, en el Embalse de El Embocador, un punto clave en esta nueva planificación hidrológica que entró en vigor el sábado.
Sobre este asunto hablamos con Borja Castro, alcalde de Alcocer (Guadalajara) y vicepresidente de la Asociación de Municipios Ribereños de Entrepeñas y Buendía, que valoró positivamente esta nueva planificación que, a su juicio, «es un punto de inflexión».
Explicó en antena que estos planes de cuencas «son de transición y que lo más determinante es la apuesta que se está haciendo no solamente por fijar los caudales ecológicos, que es el cumplimiento de la ley, sino la cesión de 830 millones para poner desaladoras en el Levante». Según Castro, se va a reducir la dependencia que tiene esta zona del agua del trasvase y la sustituirá por el agua de las desaladoras.
«Lo que queremos es que el agua no baje de un cierto nivel para dar certidumbre»
También añadió que hay una novedad en esta planificación y es «el compromiso que adquiere el Gobierno central para en un año de revisar ese memorándum en el que se blindaron los trasvases». Recordó que eran automáticos y que ahora se vuelven a revisar. «Ya se hicieron hace un año y medio, y ahora para adecuar esos planes de cuenca a la realidad de los embalses se tienen que volver a tocar».
Por lo tanto, apuntó el alcalde de Alcocer, «habrá nuevas rebajas de los umbrales de esos niveles que va a favorecer sobre todo a los intereses de los municipios ribereños y a donde vamos a reivindicar esa lámina de agua estable».
«Lo que queremos es que el agua no baje de un cierto nivel para dar certidumbre a las empresas, para dar seguridad, y tener prosperidad y crecimiento económico en la zona de los municipios ribereños», concluyó.
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