AI Bit Invest Casibom Procurando por slots de dinheiro real de qualidade? Experimente o slot Sweet Bonanza para o Brasil!

Política agraria: es hora de que el PP se ponga las pilas. Por César Lumbreras

Está por ver su poder territorial en la conferencia sectorial

Política agraria
Alberto Núñez Feijóo (Fuente: PP)

A principios de julio, poco antes de San Fermín, Luis Planas, ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, convocó una reunión de la Conferencia Sectorial de Agricultura y Desarrollo Rural en Pamplona. Este encuentro, hecho a mayor gloria de Planas y de María Chivite, la presidenta del Gobierno de Navarra, fue calificado por una parte de los consejeros de las comunidades autónomas que asistieron, como un auténtico encierro. Y la verdad es que no estaban muy desencaminados en su calificativo. Durante la reunión, en la que participaron responsables del ministerio junto a los consejeros de Agricultura, se aprobaron, por consenso o unanimidad, los cambios en el Plan Estratégico de la PAC, a pesar de que los representantes de las comunidades gobernadas por el PP no estaban de acuerdo con ellos, porque no respondían a sus peticiones, o los consideraban insuficientes.

Llegados a este punto, tocaba preguntar a «los populares» por qué dieron su visto bueno. La razón es muy sencilla y la explicaron ellos mismos: era la última oportunidad para aprobar esos cambios, antes de que los agricultores y ganaderos tuvieran que planificar sus campañas, algo que sucederá a partir de septiembre. En los dos últimos años, los perceptores de ayudas de la PAC han debido hacer sus planes sin conocer las reglas del juego, en medio de una gran inseguridad jurídica, y «los populares» no querían que se repitiese esta situación.

Parece como si los del PP no fuesen conscientes de la mayoría aplastante que tienen en la Conferencia Sectorial de Agricultura y Desarrollo Rural

Dando por bueno el argumento utilizado por «los populares» para apoyar los cambios propuestos por Planas, cabe preguntarse también cómo es posible que se llegase a esa situación de estar contra la pared debido al calendario. Y la respuesta es muy simple: los de Feijóo carecen de táctica y estrategia frente al ministro de Agricultura, que «se los lleva al huerto» un día sí y otro también. Parece como si los del PP no fuesen conscientes de la mayoría aplastante que tienen en la Conferencia Sectorial de Agricultura y Desarrollo Rural.

Tras el abandono de VOX de los gobiernos regionales en los que participaba, los de la calle Génova cuentan con los siguientes representantes: Andalucía, Extremadura, Murcia, Comunidad Valenciana, Madrid, Castilla y León, Aragón, La Rioja, Galicia, Cantabria y Baleares (aunque este último no es de fiar, ya que está entregado a Planas); en total, once de diecisiete. Mientras tanto, el PSOE solo dispone de los de Castilla-La Mancha, Asturias, Navarra y ahora Cataluña; en total cuatro. ¿Cómo es posible que, visto lo anterior, no hayan logrado, un año largo después de las últimas elecciones autonómicas, que Planas convocase una reunión extraordinaria y monográfica de la Conferencia Sectorial de Agricultura y Desarrollo Rural, para tratar los asuntos prioritarios de los populares? La respuesta: falta de ideas, nula coordinación y ausencia de estrategia y táctica.

Si se amplía el foco y se analiza lo que ha sucedido en el Congreso de los Diputados y en Senado este último año se comprueba también que falta coordinación a efectos de política agraria entre los que llevan estos asuntos en la sede central de Génova, los consejeros de las diferentes comunidades autónomas y los diputados y senadores que forman parte de las Comisiones de Agricultura en ambas cámaras. Al final, el resultado es que Planas se «va de rositas» una y otra vez.

La gran duda ahora mismo es si, de cara a este nuevo curso político que está a punto de comenzar, los populares mantendrán esta situación de falta de coordinación, o, por el contrario, se pondrán las pilas para ejercer su poder territorial en la Conferencia Sectorial de Agricultura y Desarrollo Rural y para hacer labor de oposición desde el Congreso de los Diputados y el Senado. Los asuntos y problemas que hay encima de la mesa, y los que surgirán en los próximos meses, son de un enorme calado e importancia y se requieren soluciones urgentes, como se demostró en las movilizaciones que tuvieron lugar en el primer trimestre del año.

Enfrente, los populares tienen a un Planas desganado, porque ha sufrido «el castigo» de Pedro Sánchez manteniéndolo en el Ministerio de Agricultura, cuando él quería salir de allí a toda costa y recalar en el de Asuntos Exteriores, en alguna de las embajadas importantes o de comisario en Bruselas. Además, Planas ha perdido a su principal apoyo en temas agrarios, como era Fernando Miranda, que se va a Ginebra, y se dedica a hacer el vacío a la número dos teórica, Begoña García Bernal, la secretaria de Estado de Agricultura y Alimentación, pero que no tiene competencias ni en agricultura ni en alimentación. Más fácil no lo puede tener el PP.

 

Información de César Lumbreras publicada el 19 de agosto en La Razón

Todos los derechos reservados. Queda prohibido reproducir, distribuir, comunicar públicamente o transformar, todo o parte del contenido de este sitio web, incluido, pero no limitado a, los textos, las fotos y los videos, sin el permiso previo y por escrito de Informativos Agrarios S.L.