La Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG) manifiesta su rotundo rechazo a la utilización del pollo como “producto reclamo” en las ofertas lanzadas por cadenas de supermercados como Family Cash y Carrefour.
Estas promociones, que aparentemente benefician a los consumidores, en realidad están perjudicando gravemente a 5.000 granjas avícolas. “No se puede pretender atraer clientes a tus supermercados a costa del granjero”, ha señalado Eloy Ureña, responsable del sector avícola de COAG.
Ureña: “No se puede pretender atraer clientes a tus supermercados a costa del granjero”
En estos momentos, en COAG estamos negociando un contrato digno para los granjeros que asegure condiciones justas y sostenibles para su trabajo. Sin embargo, las ofertas agresivas de las grandes cadenas de distribución dificultan nuestras negociaciones al socavar el valor del pollo y la percepción de su coste real.
Aunque los supermercados aseguran que las ofertas son puntuales, en realidad se utilizan para fijar y mantener dicho precio. “Resulta lamentable y desolador encontrarse en los lineales ofertas abusivas de pollo que tiran por tierra el enorme esfuerzo que se hace desde la producción por adecuar la oferta a la demanda y superar esta crítica coyuntura sin echar el cierre”, ha subrayado Ureña.
COAG mantiene que si las cadenas de distribución desean bajar el precio del pollo lo hagan reduciendo su propio margen de beneficios
COAG mantiene que si las cadenas de distribución desean bajar el precio del pollo lo hagan reduciendo su propio margen de beneficios en lugar de trasladar esa presión a los productores. De este modo, se garantizaría un trato justo para todos los implicados en la cadena de producción y se protegería el sustento de los granjeros.
“Pedimos a todas las partes involucradas que reconsideren sus estrategias de promoción y pongan fin a estas guerras de precios y prácticas desleales que perjudican a los más vulnerables de la cadena, los ganaderos”, ha apostillado el responsable del sector avícola de COAG.
