En nuestra sección `A la salud por la alimentación´, María Muñoz Yuste, nutricionista, habló de las propiedades del pomelo. Es rico en vitamina C y hay que tener en cuenta que «esta vitamina no la fabricamos ni almacenamos, por lo tanto la tenemos que obtener a través de la alimentación».
La vitamina C tiene propiedades antioxidantes y contribuye a mejorar el funcionamiento del sistema inmune. Además, favorece la absorción de hiero «no hemo», por lo que es beneficioso para las personas que tiene anemia.
El pomelo favorece el cuidado de la piel
Nuestra nutricionista de cabecera explicó que el pomelo también es bueno para el cuidado de la piel porque contiene carotenos -los responsables de color rojizo, amarillo- que son precursores de la vitamina A que, a su vez, protege nuestra piel del daño causado por la contaminación y el envejecimiento.
Cuida el corazón
También es un aliado en la salud cardiovascular gracias a su alto contenido en fibra y antioxidantes, que ayudan a reducir el colesterol. Por lo tanto, «es bueno para las personas hipertensas porque tiene efecto diurético».
Ayuda a adelgazar pero no es un mágico quemagrasas
Asimismo se tiene muy presente en las dietas de pérdida de peso porque tiene un efecto diurético natural y depurativo. No obstante, no hay evidencias de que tenga enzimas que queman grasa.
En definitiva, ayuda a perder peso pero con un matiz: favorece perder peso por el alto contenido en potasio -que favorece la pérdida de líquidos- y por su aporte de fibra -que da sensación de saciedad- pero tiene que formar parte de un plan de alimentación equilibrado y saludable.
Resistencia a la insulina
El pomelo, por último, es bueno para las personas con diabetes y prediabetes porque disminuye la resistencia a la insulina. Además tiene un índice glucémico bajo, por lo que contribuye a mantener los niveles de glucosa en sangre estables.
Precaución
Finalmente las personas que tomen ciertos medicamentos como hipertensivos o ansiolíticos deben tener precaución con el pomelo, ya que puede interaccionar, y también deben tener cuidado las personas con úlceras o gastritis.