El mercado del porcino de capa blanca comienza el año con estabilidad en los precios, continuando la tendencia registrada a finales del año pasado. La oferta cada vez se ajusta más a la demanda.
El mercado continúa con una demanda europea animada por la campaña de Navidad, favorecida por la repetición de precios en los principales mercados en Europa. Aunque la demanda es alta, la oferta de animales sigue subiendo y los festivos quitarán días de operaciones, pero de momento el equilibrio se impone en el mercado, según señalan fuentes de la Lonja del Ebro
Por el contrario, siguen las subidas en el lechón ante un mercado con más demanda que oferta. El fuerte ritmo de trabajo en el mercado del gordo sigue creando plazas vacías que hay que llenar con animales, tanto nacionales como de importación, indican fuentes de la Lonja del Ebro. Los principales mercados europeos también siguen subiendo y presionando para mantener la tendencia positiva otra semana más.
Mercados europeos
En Francia, para este primer mercado del año, jueves 2 de enero de 2025, la media registrada en el Mercado del Porcino Bretón se sitúa en 1,689 euros, un precio estable que prolonga la tendencia observada a finales del año 2024. Los sacrificios de la semana se vieron, por segunda semana consecutiva, frenados por un día menos de actividad, lo que provocó un aumento significativo de los pesos.
Otros mercados
En Estados Unidos, después de volver a una tendencia ascendente tras seis semanas de descenso, el precio volvió a caer ligeramente al comienzo de la semana 52. El nivel de sacrificio se mantiene relativamente estable en comparación con las semanas anteriores. En el acumulado desde principios de año, los sacrificios registraron un ligero aumento del 0,86%.
En China, según los comentarios chinos, aunque el cuarto trimestre es tradicionalmente un período de alto consumo, esto no conduce a un aumento de los precios en los mercados de la carne de cerdo. La actividad en los mataderos es intensa, pero la oferta de cerdo sigue siendo abundante y supera la demanda, lo que presiona a la baja los precios. Además, la situación sanitaria, que sigue siendo preocupante, anima a los ganaderos a comercializar rápidamente sus cerdos, aumentando así la oferta en el mercado.
