Los precios mundiales de los alimentos volvieron a bajar por tercer mes consecutivo

El coronavirus siguió contribuyendo a este descenso, según la FAO

Sube la factura mundial de la importación de alimentos

Los precios mundiales de los alimentos disminuyeron por tercer mes consecutivo en abril debido a que el impacto económico y logístico de la pandemia del COVID-19 ha provocado fuertes contracciones de la demanda de muchos productos básicos.

El índice de precios de los alimentos que elabora la FAO registró un promedio de 165,5 puntos en abril, es decir, un 3,4% menos que en marzo y el valor más bajo desde enero de 2019. A excepción del subíndice relativo a los cereales, que apenas disminuyó, todos los demás que componen el índice general registraron importantes descensos intermensuales en abril, en particular, el subíndice relativo al azúcar.

El índice de precios del azúcar de la FAO fue el que más bajó, con un 14,6% menos respecto a marzo. Este descenso se debió principalmente al derrumbamiento de los precios internacionales del petróleo crudo. La FAO explicó que “la caída de los precios de la energía supone que las plantas azucareras emplean más caña de azúcar para la producción de azúcar que para la de etanol (un sustituto de la gasolina), por lo que aumentan las disponibilidades de azúcar para la exportación”.

En cuanto a los aceites vegetales, el índice se situó en abril en una media de 131,8 puntos, un 5,2% menos que en marzo y su valor más bajo desde agosto de 2019. Esta disminución mensual se debió principalmente a la caída de los valores de los aceites de palma, soja y colza, mientras que los precios del aceite de girasol se fortalecieron. El descenso constante de los precios del aceite de palma “obedeció al desplome de las cotizaciones internacionales del petróleo crudo y a la atonía de la demanda mundial de aceite de palma tanto en el sector alimentario como en el energético a raíz de la pandemia del COVID-19”, indicó la organización.

Por el contrario, los precios internacionales del aceite de girasol repuntaron en abril, “sustentados por la firme demanda de importaciones derivada de la preocupación por la creciente escasez de suministros para la exportación”, subrayó.

Productos ganaderos

El índice de la FAO de los productos lácteos registró un promedio de 196,2 puntos en abril, es decir, un 3,6% menos que en marzo. Las cotizaciones de la mantequilla, la leche desnatada en polvo y la leche entera en polvo registraron una caída de más del 10% en abril, debido al aumento de las disponibilidades exportables y a la acumulación de reservas en un contexto de escasa demanda de importaciones.

Asimismo, el índice de la carne también disminuyó en abril un 2,7% respecto a marzo y se situó en una media de 168,8 puntos. En abril, las cotizaciones internacionales de todos los tipos de carne representados en el índice registraron una caída, ya que “la recuperación parcial de la demanda de importaciones, principalmente en China, fue insuficiente para compensar el desplome de las importaciones de otros países provocado por los continuos problemas económicos relacionados con el COVID-19, las dificultades logísticas y una caída pronunciada de la demanda del sector de servicios alimentarios a raíz del confinamiento”, explica la FAO.

Precios de los cereales

Por último, el índice de la FAO de los cereales se situó en abril en una media de 164 puntos, es decir, un valor levemente inferior al de marzo. Entre los principales cereales, los precios internacionales del trigo y el arroz subieron notablemente en abril, pero el valor general del índice de precios de los cereales de la FAO se mantuvo cerca del nivel alcanzado el mes anterior debido a un acusado descenso de las cotizaciones del maíz.

La FAO destaca que los precios del trigo subieron un 2,5% en el último mes como consecuencia de la fuerte demanda internacional ante noticias de un rápido agotamiento del cupo de exportación de Rusia, que se aplicó a finales de marzo y no se prevé que pueda ajustarse hasta el final de la presente campaña de comercialización el 30 de junio. Sin embargo, los precios de los cereales secundarios -incluido el maíz-, bajaron un 10% lastrados por la menor demanda en su utilización, tanto para la producción de piensos como de biocombustibles.

Todos los derechos reservados. Queda prohibido reproducir, distribuir, comunicar públicamente o transformar, todo o parte del contenido de este sitio web, incluido, pero no limitado a, los textos, las fotos y los videos, sin el permiso previo y por escrito de Informativos Agrarios S.L.