Me van a permitir que recuerde hoy a tres de los personajes centrales de Heidi, la serie de dibujos animados que causó furor a finales de la década de los setenta del siglo pasado. La mala de la película era la señorita Rottenmeier, adusta y severa institutriz, rígida y con mal carácter. Cada vez que veo la cara de Teresa Ribera, la candidata socialista a las elecciones europeas, me acuerdo de la señorita Rottenmeier. Ribera Rottenmeier solo regaña a dos: a los españoles (especialmente a los agricultores y ganaderos) con las políticas que ha puesto en marcha en los últimos años, y a los extranjeros, en este caso a la todavía presidenta de la Comisión Europea, la amiga Úrsula von der Leyen, a la que ha puesto a caer de un burro porque considera que ha dado marcha atrás en la aplicación del llamado Pacto Verde europeo.
En España, especialmente la gente del campo, ya sabemos de qué va Rottenmeier Ribera, y en Bruselas se van a enterar, si termina siendo la comisaria europea a propuesta de Sánchez, y si la dejan claro, porque los ataques a von der Leyen pasarán factura. Desde el punto de vista del sector agrario, Pedro Sánchez no habría podido elegir peor candidata. Cómo será la cosa que hasta otro sanchista convencido como es Luis Planas, experto en desaparecer, ha decido que la próxima semana se va, primero, a Bruselas, a la reunión del Consejo de Ministros de la UE, y luego empalma con un viaje a China hasta el domingo, puede que para no tener que participar en la campaña electoral de Ribera Rottenmeier, con la que no se lleva muy bien que digamos. En resumen, que Planas hace lo que mejor sabe, desaparecer y darse a la fuga, cada vez que hay un problema.
Otro personaje de la serie Heidi es el abuelo, que vivía en su mundo, en su nube y en la cima de los Alpes. Y en todos esos sitios parecen estar Feijóo, Dolores Montserrat y sus respectivos equipos. Vamos a ver cómo lo explico para que se enteren: en la próxima legislatura del Parlamento Europeo los eurodiputados tendrán que aprobar el Marco Financiero y presupuestario de la UE, y, por lo tanto, el dinero que habrá para financiar la PAC, no solo las ayudas, durante el periodo 2028-34. Es un asunto de vital importancia y que no se puede obviar.
Pues bien, a fecha de hoy, yo no conozco lo que piensan hacer los del PP en este asunto, el del Marco Financiero y Presupuestario, que, repito, es uno de los más importantes, sino el que más, de la próxima legislatura. A ver, señor Feijoo, señora Montserrat, es muy fácil, solo hay que ponerse a pensar un poco en las negociaciones de ese Marco Presupuestario para siete años, y responder a la siguiente pregunta: ¿es partidario el PP de mantener el dinero de la PAC, de aumentarlo o de reducirlo? Bajen un poco de la nube, aterricen y comuníquenlo para general conocimiento. Es gracia que los votantes, especialmente los del sector agrario, esperan alcanzar de ustedes.