Primero, lo positivo. El comisario designado de Presupuesto dijo en su comparecencia ante el Parlamento Europeo algo importante: “debemos financiar nuestras prioridades comunes más que antes. Todos las conocemos muy bien: competitividad, cohesión, digitalización, agricultura y transición verde”. Pues a ver si es verdad y eso se traduce en más dinero para la PAC en el próximo Marco Financiero de la UE para el periodo 2028-34.
En segundo lugar, lo que tiene luces y sombras. Me refiero a las ayudas para los agricultores y ganaderos afectados por la DANA que ha aprobado el Gobierno. De entrada, dicen desde el Ministerio de Agricultura que se podrán beneficiar de ellas tanto los que tenían suscritos seguros agrarios como los que no. Esa es la luz, pero puede haber trampa, porque ha encargado de las peritaciones al monopolio Agroseguro. También ha dicho que no habrá papeleo. Sin embargo, ni yo ni algunas organizaciones agrarias nos fiamos. Habrá que esperar a ver la letra pequeña para ver en qué consiste y si todo lo anterior va a ser verdad. ¿Qué pasa si las peritaciones de Agroseguro son a la baja y no se llega al porcentaje establecido por Planas?
El comisario designado de Presupuesto dijo en su comparecencia ante el PE: “debemos financiar nuestras prioridades comunes más que antes. Todos las conocemos muy bien: competitividad, cohesión, digitalización, agricultura y transición verde”
Por cierto, un Planas, ministro de Agricultura, que ha estado desaparecido a efectos de la DANA o gota fría durante dos semanas. Han tenido que pasar catorce días para que apareciese con las ayudas y viajase a Valencia a presentarlas. Se reunió con unos y con otros en la sede de la Delegación del Gobierno, pero no se atrevió a pisar una sola finca de las afectadas. ¿Por qué? ¿Tanto miedo tenía? Además de tarde, mal.
Por cierto, que el ministro sanchista de Agricultura ha sido jaleado por los del PP durante los últimos días como posible comisario en caso de que no salga adelante la candidatura de Teresa Ribera. ¿Cómo habrá sentado eso a esta última? Supongo que no muy bien, sobre todo a la vista de que las relaciones entre ambos, Planas y Ribera, no han sido precisamente cordiales. Y, ¿cómo habrá caído eso en La Moncloa? Pues supongo que tampoco muy bien. Y los del PP tampoco es que hayan estado muy finos proponiendo la candidatura de Planas.
Finalmente está el examen de Teresa Ribera en el Parlamento Europeo. Los populares españoles y europeos han decidido poner en el punto de mira a la todavía vicepresidenta española, que ha terminado esta semana muy tocada por su gestión antes, durante y después de la gota fría. Lo más probable es que termine siendo comisaria, pero, en ese caso, va a llegar a Bruselas en una posición política muy, pero que muy, debilitada y con von der Leyen vigilando muy, pero que muy, de cerca. Teresa Ribera no podrá hacer lo que quiera, ni mucho menos.