En su informe del mes de abril el Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA) revisó a la baja en 3,2 millones de toneladas su previsión anterior sobre producción mundial de cereales 2022/23, que sitúa ahora en 2.225,3 millones de toneladas.
En concreto, en el caso de los cereales secundarios el USDA ha revisado a la baja la producción mundial en 3,3 millones de toneladas, con lo que se espera una cosecha de 1.436,2 millones de toneladas. Argentina es la responsable de este descenso, ya que se estima una producción de 45,7 millones de toneladas, 3 millones de toneladas menos que en el informe del mes pasado. También disminuye en la Unión Europea 1,7 millones de toneladas (133,8 millones de toneladas). Por el contrario, aumenta en Rusia 2,3 millones de toneladas, situándose en 44,1 millones de toneladas.
Asimismo, hay que destacar que dentro de los cereales secundarios el USDA ha revisado al alza la cosecha mundial de cebada en 151,9 millones de toneladas, es decir, 330.000 toneladas más. La de avena aumenta también 520.000 toneladas, situándose en 25,7 millones de toneladas y la de sorgo disminuye 340.000 toneladas, situándose en 57,6 millones de toneladas. En cuanto al maíz, el USDA ha revisado a la baja en 3 millones de toneladas su previsión anterior, con lo que ahora apunta a 1.144,5 millones de toneladas.
En lo que respecta al trigo, el USDA mantiene prácticamente sin variaciones la previsión de producción mundial para la presente campaña 2022/23 con respecto al informe de marzo en 789 millones de toneladas. En la Unión Europea, el USDA prevé una producción de trigo de 134,3 millones de toneladas, es decir, 360.000 toneladas menos que en el mes de marzo. Asimismo, ha revisado a la baja la producción en Argentina en 350.000 toneladas, situándose en 12,55 millones de toneladas.
Consumo y stocks
En lo que respecta a los consumos, el USDA prevé un aumento del uso de trigo de 2,8 millones de toneladas de toneladas respecto a la previsión de marzo, con lo que se situaría en 796 millones de toneladas. El consumo de cereales secundarios baja 1,7 millones y se sitúa en 1.448,3 millones de toneladas. Por último, los stocks finales de trigo disminuyen en 2,1 millones de toneladas y los de cereales secundarios se mantienen sin cambios.
