En su informe de este mes de septiembre, el Consejo Internacional de Cereales (CIC) ha mantenido en 2.294 millones de toneladas su previsión de producción mundial de la presente campaña 2023/24 del pasado mes de agosto.
Es un volumen superior en un 1,2% al de la campaña anterior y se aproxima mucho al récord de 2021/22. La demanda sí será histórica, según las previsiones del organismo, que apuntan a más de 2.300 millones de toneladas.
Con respecto a la campaña anterior, el CIC espera una mayor cosecha de maíz y sorgo que compensa con creces los descensos en la producción de trigo, cebada y avena. El consumo crece gracias, sobre todo, al incremento de la demanda para alimentación animal (+2,2%, hasta 1.040 millones de toneladas), aunque también será mayor el consumo humano (+1%; 763 millones de toneladas) y el volumen destinado a uso industrial (+1,4%; 370 millones de toneladas).
Los intercambios mundiales disminuirán por tercera campaña consecutiva y el stock final de campaña podría caer en un 1,8%, hasta los 588 millones de toneladas, aunque el CIC subraya que las existencias en los principales países exportadores (Argentina, Australia, Canadá, UE, Kazajstán, Rusia, Ucrania y Estados Unidos) crecerán casi un 6% debido, sobre todo, a Estados Unidos.