En su informe del presente mes de enero, el Consejo Internacional de Cereales (CIC) ha revisado a la baja en 5 millones de toneladas su estimación mundial de producción de maíz, que sitúa ahora en 1.161 millones de toneladas, un volumen inferior al consumo previsto; por el contrario ha elevado la de trigo hasta los 796 millones de toneladas.
Considerando la producción total de grano, el Consejo Internacional recoge que apenas hay cambios respecto a las cifras que manejaba en su informe de noviembre del año pasado.
La caída se debe a una cosecha de maíz más corta por la disminución en Estados Unidos, Ucrania y la Unión Europea
En total, estima un volumen de 2.256 millones de toneladas, 34 millones menos que en la campaña anterior. La caída se debe a una cosecha de maíz más corta (-58 millones) por la disminución en Estados Unidos, Ucrania y la Unión Europea. Por el contrario, aumenta la de trigo, que alcanza un nuevo récord, y se recupera la de cebada y avena.
El consumo de cereales previsto en esta campaña (2.275 millones de toneladas) será superior a la producción, por lo que el Consejo Internacional de Cereales apunta que disminuirán las reservas finales.