El Boletín Oficial de Castilla y León (BOCYL) publicó, el 4 de junio, la Orden por la que se establecen las bases reguladoras de la concesión de las ayudas destinadas para la mejora de la producción y comercialización de la miel.
Las ayudas contempladas tienen como finalidad mejorar las condiciones generales de producción y comercialización de los productos apícolas.
Con estas ayudas los apicultores de esta Comunidad Autónoma podrán beneficiarse de seis líneas de subvenciones destinadas a recibir información y asistencia técnica; a luchar contra los agresores y enfermedades de la colmena, como la varroosis; a racionalizar la trashumancia; a medidas de apoyo para el análisis de la miel; a la repoblación de la cabaña apícola; y a mejorar la calidad de los productos apícolas con el objetivo de posicionarlos en el mercado a través de la diferenciación.
Los beneficiarios de estas ayudas serán apicultores que tengan, al menos, 150 colmenas, así como cooperativas apícolas y organizaciones representativas con personalidad jurídica propia, y los laboratorios, debidamente acreditados, que efectúen análisis de las características fisicoquímicas de la miel.
Además, se dará prioridad a los jóvenes y a las mujeres, con el objetivo de fomentar la incorporación al campo y fijar población en el medio rural.
Para recibir estas subvenciones, los beneficiarios deberán realizar la actividad apícola con anterioridad al 1 de enero de 2018, encontrarse al corriente de sus obligaciones tributarias, tener contratado un seguro de responsabilidad civil para desarrollar la actividad y realizar, al menos, un tratamiento frente a la varroosis.