La producción de piensos para el ganado podría situarse este año en la UE en 149,9 millones de toneladas, lo que supondría un leve descenso del 0,16% respecto a 2020, según las previsiones de la Federación Europea de Fabricantes de Alimentos Compuestos (FEFAC). Sin embargo, esa estabilidad oculta evoluciones diversas dependiendo del tipo de piensos. La producción de alimentos para el porcino caerá el 1,3% por la conjunción de diversos factores.
Los fabricantes atribuyen ese descenso a la disminución de la demanda por parte de mercados exteriores clave, a los elevados costes de los cereales y al impacto de la peste porcina africana. Los países donde el descenso será más significativo son Alemania, Austria, Portugal, Finlandia y Hungría. Además, algunos Estados miembros, como Holanda y Bélgica, están reduciendo su cabaña para limitar sus emisiones contaminantes.
Por el contrario, la producción de piensos para aves registrará un incremento del 0,8% a pesar de la presencia de la gripe aviar en varios Estados miembros de la UE. La mejora se debe, según FEFAC, a la reapertura del canal horeca tras las restricciones impuestas por la pandemia de Covid-19 y se ha notado principalmente en destinos veraniegos, como Portugal y España, así como en Hungría y Rumanía. Con la salida del Reino Unido de la UE, los piensos para aves han perdido su primera posición en el total de producción de piensos comunitaria, que ocupan ahora los alimentos para el porcino.
Por último, la producción de alimentos para el vacuno se mantendrá prácticamente estable respecto al año pasado (+0,1%), ya que el aumento en algunos países (Italia, Polonia y Rumanía) se ha visto anulado por descensos en otros. La disponibilidad de pastos ha reducido la demanda.
Misma situación de cara a 2022
De cara a 2022 los fabricantes no esperan cambios significativos: se mantendrá la situación en lo que respecta a las exportaciones de carne de porcino; los precios de los cereales en el mercado mundial continuarán al alza (se espera que hasta finales de la campaña 2021/22); seguirá habiendo presencia de enfermedades como la peste porcina africana o la gripe aviar; todavía habrá restricciones por Covid-19; y continuará la presión para que los sectores ganaderos reduzcan sus emisiones de gases de efecto invernadero y otros contaminantes.