La producción mundial de trigo de 2024/2025 podría situarse en 797 millones de toneladas. En la nota informativa de la FAO sobre la oferta y la demanda de cereales, publicada el pasado 8 de marzo, la organización destaca que aunque esta cantidad representa un incremento del 1% frente a la producción de 2023/2024, aún se mantiene por debajo del récord alcanzado en 2022/2023.
En concreto, la FAO destaca que en Estados Unidos, la bajada de los precios ha provocado un descenso interanual del 6% en la siembra de trigo de invierno. No obstante, con las abundantes precipitaciones registradas desde el último trimestre de 2023 tras dos años consecutivos de sequía generalizada, se han incrementado tanto las perspectivas de rendimiento como las expectativas de que la superficie cosechada pueda superar el nivel de 2023. Se prevé que la producción total de trigo del país en 2024/2025 ascenderá a 51,5 millones de toneladas, cifra que se encuentra por encima de la última media quinquenal y de la producción de 2023/2024.
En Europa, según indica la FAO, las intensas precipitaciones interrumpieron y retrasaron la siembra de la cosecha de trigo de invierno, sobre todo en los principales países productores, Alemania y Francia, y se prevé que la superficie total de trigo disminuya de forma moderada en 2024/2025. Se prevé que, en combinación con las recientes olas de frío y los déficits de precipitaciones que afectaron a algunas partes, la producción de trigo de la Unión Europea disminuirá ligeramente en 2024/2025 y se situará en torno a los 133 millones de toneladas.
La superficie de disminuirá aún más en Ucrania
Por último, la FAO estima que la superficie sembrada con trigo en Ucrania disminuirá aún más en 2024/2025, “ya que la guerra sigue obstaculizando el acceso a los campos e imponiendo graves restricciones financieras a los agricultores, lo que limita la rentabilidad de la producción de trigo”.
Ligero aumento de la producción de 2023/2024
Por otro lado, la FAO ha revisado ligeramente al alza la producción mundial de cereales en 2023/2024, situándose en 2.840 millones de toneladas (incluido el arroz), lo que representa un aumento interanual del 1,1% (30,4 millones de toneladas). Este crecimiento se debe fundamentalmente a un considerable aumento del pronóstico relativo a la producción mundial de maíz (+5,3%), impulsado por Brasil, China y Estados Unidos, que compensa con la disminución de la producción mundial de trigo prevista (-2,3%).