La Diputación de Palencia ha aprobado un protocolo para desarrollar un programa de acciones preventivas, permanentes y atemporales para luchar contra el topillo campesino y minimizar los riesgos de su presencia excesiva en el territorio.
La Junta de Gobierno de la Diputación, que se ha reunido este lunes 27 de enero, ha aprobado este protocolo en colaboración con la Consejería de Agricultura de Castilla y León. Además, varias Diputaciones se suscribirá en próximas fechas.
Objetivos del protocolo
Según la institución provincial, el protocolo pretende enmarcar las actuaciones que se realizan en la lucha contra el topillo campesino dentro de un programa, con un modelo de gestión integrada de carácter preventivo, permanente y atemporal, basado en el manejo continuo del territorio.
También define el ámbito geográfico para la ejecución de unas prácticas fitosanitarias mínimas, que incluye diversas comarcas de la comunidad autónoma en las provincias de Palencia, Burgos, León, Valladolid y Zamora. Participarán todos los agentes implicados en la gestión de este problema, incluidas las Diputaciones provinciales.
Para esta institución es fundamental la cooperación entre administraciones para minimizar los riesgos derivados de la presencia del topillo campesino en el territorio. Por ello, ha apostado por este programa compatible y respetuoso con la conservación de la biodiversidad y los recursos naturales.
