Un queso azul de Noruega, el Kraftkar, se ha proclamado como el mejor del mundo al hacerse con el World Cheese Award, el máximo galardón de este concurso, que ha celebrado su vigésimo novena edición en San Sebastián, en el marco del International Cheese Festival.
El campeón se impuso a otros 3.060 quesos de 35 países que han acudido a este certamen, procedentes de los cinco continentes.
Un total de dieciséis quesos resultaron finalistas, entre ellos, un Cala Blanc y un Cremositos del Zújar, que se han situado en segundo puesto -empatados a puntos- seguidos, en tercera posición, de otro español -un Oveja Grazalemeña-, que ha obtenido la misma puntuación que un italiano Gorgonzola Doce.
En el marco de este certamen, también se han entregado las medallas de oro, plata y bronce a otros quesos que ha seleccionado un jurado internacional compuesto por 260 especialistas.
Los quesos Baztarrika, de Gabiria (Gipuzkoa), y Baskaran, de Markina (Bizkaia), ambos con galardones «supergold», han sido designados como los mejores quesos vascos presentados en este festival.
Noruega premiada por primera vez
Gunnar Waagen es el nombre del productor que ha obtenido el máximo galardón con un queso azul artesanal que elabora en su granja de Tingvoll, un pueblo situado en el centro de Noruega, con leche de vaca pasteurizada.
De este modo, Noruega aparece por primera vez en la lista de premiados de este certamen, que encabezan los quesos británicos y los franceses. No obstante, en el palmarés también figuran dos españoles, un queso curado de cabra de Arico (Tenerife), que ganó en 2008, y un Dehesa de los Llanos, de Albacete, que lo hizo en 2012.
Parte del jurado ha reconocido que los quesos españoles se han empezado a hacer un hueco en este concurso desde hace aproximadamente diez años, lo que obedece a que ahora se están empezando a conocer y eso hace que los paladares de los jurados internacionales, hayan comenzado a «comprender» su sabor.
