La Guardia Civil ha desarticulado una red que vendió casi 600 toneladas de aceitunas con documentación falsa en pueblos de la provincia de Sevilla y se sospecha que la venta se hacía en estas condiciones para blanquear dinero. Hay siete investigados.
El equipo ROCA de la Guardia Civil de la Compañía de Osuna ha sido el encargado de realizar esta operación, dentro de una campaña destinada a investigar y esclarecer los hechos delictivos que se produjeran durante todo el periodo de recolección de la aceituna.
Durante la denominada Operación Madroño 23 y con la colaboración de agricultores, personal de vigilancia rural, asociaciones y otros entes colaboradores, se esclarecieron 18 delitos de hurto de aceitunas de entidad, se investigó a 28 personas como autores de estos delitos y se recuperaron alrededor de 30.000 kilogramos de aceitunas, intervenidas en las diferentes actuaciones.
A raíz de esta investigación y de forma paralela se inició una nueva operación, en la que los agentes se centraron en puestos de compra de aceitunas ubicados en la Sierra Sur Sevillana, donde se detectó la presencia de grupos de personas que transportaban aceitunas amparadas con documentos de acompañamiento del fruto (DAT) que levantaron las sospechas de los agentes en relación al origen de los mismos.
Con el apoyo de la Delegación Territorial de Agricultura de Sevilla se obtuvieron indicios suficientes que acreditaron la comisión de numerosos delitos de falsedad en los documentos públicos utilizados en las actividades desarrolladas por las personas responsables de los centros de compra de aceitunas.
Por estos hechos se llevó a cabo la investigación de siete personas como presuntos autores de supuestos delitos de falsedad en documento público y se demostró que 553.849 kilos de aceitunas fueron entregadas y molturadas con el amparo de documentación falseada.
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