Reducir las grasas en las comidas mejora el estado de ánimo, el bienestar digestivo y proporciona la misma sensación de saciedad, según un estudio del Hospital Vall d’Hebron de Barcelona, en colaboración con El Celler de Can Roca (restaurante).
Uno de sus investigadores y jefe del Servicio del Aparato Digestivo del Hospital, Fernando Azpiroz, ha explicado que este efecto puede tener implicaciones clínicas en pacientes con síntomas relacionados con la comida o con una mala tolerancia.
Asimismo, ha apuntado que el trabajo desmiente esa concepción de que la grasa es la principal responsable de la satisfacción que producen las comidas.
Para llevar a cabo el experimento, El Celler de Can Roca preparó dos recetas de hummus con los mismos ingredientes (garbanzos, aceite de oliva, agua tahini, limón y comino) en las mismas proporciones a excepción de la cantidad de grasa.
El trabajo desmiente esa concepción de que la grasa es la principal responsable de la satisfacción que producen las comidas
Un grupo de 12 hombres probó ambas recetas: el primer día, el hummus ligero; el segundo, un hummus más graso. La percepción sobre las sensaciones previas y las producidas por la comida se evaluó a los 5 y 10 minutos de la ingesta, y cada 10 minutos, cinco veces después de la misma.
«El hummus ligero produjo una mayor sensación de bienestar digestivo y anímico que el hummus graso, y la misma sensación de saciedad», ha señalado Azpiroz.
A su juicio, el resultado «es sorprendente» porque hasta ahora muchos estudios mostraban que la grasa era la responsable de inducir el bienestar digestivo y mejorar el estado de ánimo. No obstante, mediante este trabajo han demostrado que a partir de cierta cantidad de grasa hay menor bienestar digestivo y peor estado anímico.
Por su parte, el responsable de la sala El Celler de Can Roca, ha apuntado que «el placer y la saciedad» no deberían excluir a la salud.