La Asociación de Municipios Ribereños de los Embalses de Entrepeñas y Buendía, en Castilla-La Mancha, se ha mostrado «terriblemente decepcionada» con el Ministerio de Transición Ecológica tras la aprobación de un trasvase de 38 hectómetros cúbicos del Tajo al Segura, y le ha instado «a cambiar de política si quiere hacer honor a su nombre y despegarse de Agricultura».
Según los ribereños, «el infausto Memorándum dejaba poco margen de actuación, pero habrá que modificarlo si de verdad se quiere cambiar de modelo respecto al medio ambiente como parece indicar la ministra Teresa Ribera».
El presidente de la Asociación, Fernando Pérez Torrecilla, ha señalado que «la ministra tenía una oportunidad histórica de dar el primer paso para la finalización de esta terrible injusticia, que sacrifica un río, el Tajo, y sentencia de muerte una región, la nuestra, para beneficiar a unos pocos empresarios que ponen por delante el dinero a corto plazo frente a la conservación del Medio Ambiente».
«La ministra tenía una oportunidad histórica de dar el primer paso para la finalización de esta terrible injusticia»
En este sentido, ha apuntado que «no era necesario este nuevo trasvase», como manifiesta el reciente informe del Ministerio, el de los ecologistas o las lluvias recogidas en Murcia.
Por otro lado, los ribereños han acogido con satisfacción que esta vez la agricultura industrial del regadío solo reciba el 50% de esa agua, mientras el 40% es para consumo humano y el otro 10% para compensar pérdidas en el viaje, pero han advertido de que hay que seguir luchando para que la sobreexplotación de regadíos se reduzca y la cuenca del Segura no necesite agua del Tajo por sistema.
«Confiamos que los pasos del Ministerio vayan destinados a modificar el Memorándum firmado en tiempos de Cospedal (que complica mucho la labor a la nueva ministra) y dejar de primar los intereses de unos pocos frente a los de toda una nación, que se enfrenta a un futuro de desertificación y pobreza si no empezamos a pensar en verde», ha señalado.
Entienden que la premura de la reunión de la Comisión de Explotación del Trasvase Tajo-Segura, recién llegados al Gobierno y sin haber renovado todavía todos los cargos del Ministerio, haya influido a la hora de tomar «esta equivocada decisión de seguir alimentando el regadío».
Sin embargo, ha indicado que «eso no puede volver a ocurrir en el futuro» por lo que ha pedido a la ministra que, para la reunión de la Comisión del próximo mes de agosto, «recuerde que, efectivamente, los trasvases deben ser algo extraordinario, sobre todo los destinados a la insostenible agroindustria del SCRATS».
El Gobierno de C-LM achaca el trasvase al anterior Gobierno
Por su parte, el consejero de Agricultura, Medio Ambiente y Desarrollo Rural de Castilla-La Mancha, Francisco Martínez Arroyo, ha achacado la autorización del trasvase a la «inercia» del Gobierno de Mariano Rajoy.
A su juicio, «lo importante, no es la decisión del trasvase, sino el cambio absoluto de planteamiento del Gobierno de España».
En ese sentido, se ha referido a las palabras de la ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, que apuntó que los trasvases deben ser «extraordinarios» y se ha mostrado «absolutamente convencido de que el cambio de Gobierno va a ayudar a la región».