Rusia está dispuesta a restringir la exportación de alimentos en caso de que se desestabilice la situación en su mercado interno, según afirmó el viceprimer ministro ruso Dmitri Pátrushev.
«Si la situación no se desarrolla en favor de la estabilidad del mercado propio, tenemos palancas para influir, como posibles restricciones a las exportaciones», dijo Pátrushev. Al mismo tiempo, indicó que Rusia no quiere perder mercados que tardó años en conquistar.
Rusia no quiere perder mercados que tardó años en conquistar
Pátrushev recalcó que el Ejecutivo vigila que los principales productos alimenticios sean asequibles económicamente para la población.
Según datos preliminares del Gobierno, el año pasado la inflación fue del orden del 9,5%, siendo notoriamente más elevada en el apartado de los alimentos, como es el caso de las patatas, cuyo precio aumentó un 50%.
En 2023 este país exportó más de 100 millones de toneladas de alimentos por un valor de 43.500 millones de dólares.
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