Lucas Jiménez, presidente del Sindicato Central de Regantes del Trasvase Tajo-Segura (SCRATS), intervino en el primer programa del año de AGROPOPULAR -7 de enero de 2023- para explicar la posición de los regantes sobre el Plan Hidrológico del Tajo y detallar cuáles son las reivindicaciones de cara a la manifestación del próximo miércoles frente al Ministerio para la Transición Ecológica, en Madrid.
Según explicó Jiménez, la planificación hidrológica es «claramente política» y este es uno de los motivos por los que se manifestarán. En este sentido, advirtió que llevan avisando de que esto podría producirse desde hace varios años. También lamentó que a pesar de que se llegó a un acuerdo entre los líderes regionales semanas después la ministra Teresa Ribera decidió acabar con ese acuerdo lo «que ha motivado una segunda guerra dentro de la ya existente guerra del agua».
Desde el Sindicato Central de Regantes del Trasvase Tajo-Segura reclaman que «sin afectar a la calidad del agua del río Tajo, algo que nos preocupa, se siga respetando una infraestructura que llevamos pagando muchos años y muy cara y que nos dejen vivir en paz«. Jiménez añadió que «se han bajado todos los caudales ecológicos de todos los tramos, de todos los ríos, por lo que no entendemos por qué se eleva en ese Alto Tajo».
«Si se gestiona bien, hay agua para todo el mundo»
De cara al trasvase piden que se mantengan los niveles actuales. «El caudal que afecta directamente a la reserva de Entrepeñas y Buendía, que son las que suministran agua al trasvase, es un caudal que se ha demostrado que es suficiente para mantener la calidad y el buen estado de las masas de agua en el Alto Tajo». «Hay que dejarlo estar y permitir que no se produzca un agujero negro que el propio Ministerio reconoce que puede costar miles de desempleos y la desaparición de muchas hectáreas de regadío».
También pidió en antena al Gobierno central «que reine la lógica para que nos podamos entender todos porque en este país, si se gestiona bien, hay agua para todo el mundo». A los partidos políticos les solicitó que «confluyan políticamente y que saquen de las urnas el tema del agua».
Por otro lado, el presidente de SCRATS se refirió al fin de las subvenciones que se daban al agua desalada y al aumento de su precio. «Este es el peligro del agua desalada, que a día de hoy a un agricultor murciano, alicantino o almeriense le puede estar costando en torno a 1,40 euros», concluyó.
Escuche la intervención completa de Lucas Jiménez