Alemania podría padecer otro verano de sequía extrema e incluso ser más seco que el de 2018, según las previsiones del Servicio Alemán de Meteorología (DWD).
El director del departamento agrícola del DWD, Udo Busch, ha apuntado que de persistir la escasez de precipitaciones en los próximos meses, la sequía podría ser mayor que la del año pasado.
Cabe recordar que la situación del verano de 2018 fue alarmante, con máximas récord en Alemania de 38,9 grados y ausencia de precipitaciones destacables durante meses. Esta situación de escasez no se revirtió durante el pasado invierno y afectó especialmente al este del país.
De cara al verano de 2019, Busch ha advertido de que a pesar de que se produzcan fuertes precipitaciones durante las próximas semanas, éstas no serán suficientes para regenerar la tierra. «El estado de la vegetación en muchas regiones de Alemania es mucho peor que el año pasado», ha añadido.
Las autoridades alemanas han activado ya las alertas por riesgo de incendio en la región que envuelve Berlín y otras partes del país, donde se prohibieron preventivamente las tradicionales hogueras de Semana Santa.
El propio Servicio Alemán de Meteorología pronosticó ya al cierre de 2018 que Alemania sufrirá sequías frecuentes y otras inclemencias extremas como consecuencia del cambio climático.
Las autoridades alemanas han activado ya las alertas por riesgo de incendio
En su informe anual, el DWD recoge que en 2018 el cómputo de precipitaciones registradas en Alemania fue apenas el 60% de lo habitual en ese país.
Los meses calificables de «secos» se extendieron de abril a noviembre, por lo que la situación de sequía se mantuvo prácticamente todo el año, con consecuencias para el campo que se arrastran al año siguiente amenazado además por esta nueva sequía extrema.
La temperatura media en Alemania en 2018 fue de 10,5 grados, esto significa que fue el año más cálido desde que empezaron a registrarse estas mediciones sistemáticas, en 1881, ha concluido el DWD.