El potencial de producción vitícola ascendía en España a 1.022.966 hectáreas a 31 de diciembre de 2015, cifra que supone un ligero descenso respecto al existente solo unos meses antes, a 31 de julio del mismo año (1.026.747 hectáreas), fecha de cierre de la campaña 2014/15. Continúa, por tanto, el goteo a la baja. Desde la campaña 2000/2001 se ha reducido en 193.341 hectáreas.
Los datos publicados por el Ministerio de Agricultura muestran que el 93% de ese potencial corresponde a superficie plantada de viñedo (951.201 hectáreas a 31 de diciembre del año pasado) mientras que las 71.765 hectáreas restantes son derechos de plantación de viñedo sin utilizar, de los que el 88% se encuentra en poder de los agricultores. Hay que recordar que, de acuerdo con la reglamentación que ha entrado en vigor este año, para la utilización de estos derechos es necesario solicitar su reconversión a las nuevas autorizaciones, aunque sus titulares tienen de plazo hasta finales de diciembre de 2020.
El informe del Ministerio recoge que todas las Comunidades han visto reducido su potencial vitícola desde la campaña 2000/2001, salvo La Rioja, Galicia, Baleares, País Vasco y Cantabria. La que más potencial ha perdido ha sido Castilla-La Mancha (-90.217 hectáreas), seguida de Extremadura y Murcia.
Por su parte, la superficie plantada de uva de vinificación ha disminuido en 173.232 hectáreas. El 48% de ese recorte se ha registrado en Castilla-La Mancha y el 10% en la Comunidad Valenciana. Por el contrario, la superficie plantada ha aumentado en La Rioja, País Vasco y Galicia.
Del total de la superficie plantada de viñedo en España, el 95% se encuentra en zonas DOP o IGP.