La Comisión Europea ha abierto desde el 1 de agosto y hasta el 24 de octubre una consulta pública sobre su estrategia a favor de los suelos de cara al año 2030, adoptada el año pasado. Sobre la base de la misma presentará propuestas legislativas en el segundo trimestre de 2023.
La degradación de los suelos persiste e incluso se ha agravado en la UE en los últimos años. El objetivo de Bruselas es conceder a los suelos el mismo nivel de protección que existe para el agua, el medio ambiente o el aire en la Unión, con el fin de frenar la pérdida de biodiversidad y el cambio climático, así como de preservar la seguridad alimentaria de la UE.
La Comisión podría proponer una serie de medidas obligatorias: informes regulares sobre los avances logrados en la gestión de la contaminación de los suelos, de la utilización de las tierras y de la aplicación de una jerarquía en el uso de las mismas, definición de la recuperación neta de tierras, etc.
La CE contempla un certificado de salud de los suelos para las compraventas
También contempla un certificado de salud de los suelos para las compraventas con el fin de proporcionar a los compradores información sobre las principales características y la salud de los suelos de las fincas que tienen intención de adquirir.
“La ausencia de condiciones de competencia equitativas entre los operadores económicos, que están sometidos a normas nacionales de protección de los suelos muy diferentes, supone una distorsión del mercado interior”, según la Comisión.