La superficie de trigo blando y trigo duro habría disminuido en España en la presente campaña respecto a la anterior, de acuerdo con el primer avance de superficie de cereales publicado por el Ministerio de Agricultura. En el caso del trigo blando el descenso sería del 4,3%, es decir, de unas 80.000 hectáreas.
En lo que respecta al resto de cereales, la superficie se mantendría estable o aumentaría ligeramente. Hay que apuntar, sin embargo, que el avance del Ministerio no está completo, ya que falta la estimación de siembra de la cebada de dos carreras, la más importante, que el año pasado ocupó 2,15 millones de hectáreas.
Cuando se disponga de cifras más ajustadas se verá si la fuerte subida de los costes de producción ha tenido impacto en las siembras de grano y, más adelante, si el encarecimiento en concreto de los fertilizantes lleva a los agricultores a reducir su uso, lo que afectaría a la productividad.