Una escalada de tensiones comerciales tendría efectos negativos significativos sobre todo para EEUU, a quien afectaría más que a China, según un artículo que ha publicado hoy -26 de septiembre- el Banco Central Europeo (BCE) en su último boletín económico.
El estudio calcula en un escenario simulado una subida de los aranceles del 10% a todas las importaciones por parte de EEUU y represalias de sus socios comerciales similares del 10% a las importaciones de productos estadounidenses.
Según el BCE, el canal directo del comercio reduciría la actividad económica de EEUU en un 1,5% en el primer año y la posición exportadora neta de este país se deterioraría sustancialmente.
La situación de las empresas estadounidenses también se vería afectada, ya que cada vez invertirían menos y contratarían a menos personas, lo que amplificaría el efecto negativo sobre la economía de norteamericana al reducir la demanda interna.
Según los cálculos de la simulación, el tercer año de aplicación de los aranceles el crecimiento también sería un 1% menor.
China podría ganar cuota de mercado en terceros países a costa de los exportadores de EEUU
No obstante, el proteccionismo no tendría efectos tan negativos en China porque, aunque en el primer año el consumo interno y la inversión caerían, esta bajada se vería compensada con la fuerte posición exportadora.
En concreto, China podría ganar cuota de mercado en terceros países a costa de los exportadores de EEUU, aunque con el tiempo estos beneficios se reducirían.
Los autores del estudio han recordado que los anuncios de aranceles por parte de la Administración estadounidense y las represalias de sus socios comerciales han incrementado el temor a una posible guerra comercial.
Sin embargo, han apuntado que recientemente se han producido señales de reducción de esas tensiones tras una reunión entre EEUU y la Unión Europea y tras los acuerdos que han alcanzando EEUU y México.