La UPA ha denunciado esta semana ante la Mesa de Adversidades Climatológicas que el tiempo que se está registrando este invierno está causando graves problemas de gestión y planificación de las explotaciones.
Entre las consecuencias están el aumento de los costes de producción, reducción de algunas cosechas y la caída de los precios por acumulación de oferta a nivel europeo.
Por ello, han propuesto que la bajada de los precios por la meteorología sea considerada una causa más a la hora de diseñar planes de ayuda y rescate del sector, como ya lo son el sobrecoste de la alimentación para la ganadería o la reducción de cosechas por sequía.