UPA y COAG de Ávila han denunciado un nuevo ataque de lobos esta semana en una explotación ganadera de la provincia que ya había sufrido dos ataques más en el último mes.
En esta ocasión, los lobos han arrancado las orejas a un ternero de tres meses que, aunque sigue con vida, tiene mordeduras profundas en varias partes del cuerpo.
Las organizaciones consideran que la política en la gestión del lobo está ocasionando graves perjuicios a los profesionales, por lo que reclaman que la Junta indemnice a los afectados de forma rápida y ajustada al daño.