En su informe del mes de febrero el Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA) revisó a la baja en 1,1 millones de toneladas su previsión anterior sobre producción mundial de cereales 2022/23, que sitúa ahora en 2.226,5 millones de toneladas.
En concreto, en el caso de los cereales secundarios el USDA ha revisado a la baja la producción mundial en 3,5 millones de toneladas, con lo que se espera una cosecha de 1.442,7 millones de toneladas.
Argentina es la responsable de este descenso, ya que se estima una producción de 55,5 millones de toneladas, 5,3 millones de toneladas menos que en el informe del mes pasado.
Asimismo, hay que destacar que dentro de los cereales secundarios el USDA ha revisado al alza la cosecha mundial de cebada en 150,4 millones de toneladas, es decir, 1 millón de toneladas más. La de avena aumenta también ligeramente 200.000 toneladas, situándose en 25 millones de toneladas y la de sorgo disminuye también ligeramente 300.000 toneladas, situándose en 58,5 millones de toneladas.
En cuanto al maíz, el USDA ha revisado a la baja en 4,5 millones de toneladas su previsión anterior, con lo que ahora apunta a 1.151,3 millones de toneladas. Hay que destacar el descenso de la producción de maíz en Argentina, que se estima en 47 millones de toneladas, 5 millones de toneladas menos que en el informe anterior. Esta disminución se debe principalmente a la sequía que está padeciendo el país.
Sube la previsión de producción mundial de trigo
En lo que respecta al trigo, por el contrario, el USDA revisó al alza en 2,4 millones de toneladas su previsión de producción mundial para la presente campaña 2022/23 con respecto al informe de enero. En total se espera una cosecha mundial de 783,8 millones de toneladas (frente a los 781,3 millones que manejaba en el informe anterior).
Australia es una de la responsable de este aumento, ya que se estima una producción de 38 millones de toneladas, 1,4 millones de toneladas más que en el informe del mes pasado. También aumenta en Rusia 1 millón de toneladas (92 millones de toneladas).
Consumo y stocks
En cuanto a los consumos, el USDA prevé un descenso del uso de cereales secundarios de 2,2 millones de toneladas de toneladas respecto a la previsión de enero, con lo que se situaría en 1.454,8 millones de toneladas. El consumo de trigo sube 1,4 millones y se sitúa en 791,1 millones de toneladas. Por último, los stocks finales de cereales secundarios disminuyen en 790.000 toneladas y los de trigo suben 750.000 toneladas.