El Consejo Sectorial Vitivinícola de Cooperativas Agro-alimentarias de España ha revisado a la baja la previsión de vendimia 2024-2025 lanzada hace tres meses y ahora la sitúa en 37.036.500 hectolitros de vino y mosto.
La sequía ha afectado un año más con fuerza a la zona oriental de España, que obtiene una cosecha muy baja; no obstante, esta se compensa con unas producciones medias en Castilla-La Mancha y Extremadura.
Vendimia por comunidades autónomas
En Castilla-La Mancha ha predominado el calor y el tiempo seco, lo que ha favorecido la escasa proliferación de enfermedades criptogámicas y la buena sanidad de la uva, hasta prácticamente el final de la vendimia. Las previsiones apuntan a un aumento respecto al año anterior, con casi 6 millones de hectolitros más de vino y mosto.
En el caso de Extremadura las lluvias han permitido recuperar un poco las viñas, agotadas por la sequía de años anteriores, pero sigue siendo insuficiente.
Asimismo, en Castilla y León el invierno fue «duro» con heladas en el Bierzo, Cigales, Rueda y Ribera del Duero y también mucha lluvia e importantes tormentas, la previsión es un poco menor a la del pasado año.
En Cataluña la situación ha sido muy irregular en función de la zona. La afectación más grave es en el Priorat, el secano de la Terra Alta y otras comarcas de Tarragona por la grave sequía. En la zona de Cava, las lluvias de primavera permitieron salvar las cepas de Camp de Tarragona y Penedés, pero este año apenas tendrán producción.
En la Comunidad Valenciana apenas ha llovido, por lo que se estima una cosecha baja, similar a la del pasado año, con más uva en Utiel Requena, pero disminución respecto a la pasada campaña en la Denominación de Origen Valencia.
El viñedo en La Rioja, por su parte, ha tenido una campaña «difícil y muy corta» debido a las lluvias de septiembre, tormentas aisladas, los bruscos cambios de temperatura, además del corrimiento.
Andalucía ha mantenido un estado sanitario de la viña muy bueno en todas las zonas. En Galicia se estima una cosecha ligeramente inferior al año pasado con la uva en buen estado sanitario. Mientras que la vendimia en Aragón volverá a estar casi un 15% por debajo de la recogida habitual en los últimos años.