Esa es la cuestión que la Comisión Europea plantea a los ciudadanos comunitarios de cara a la presentación de una visión a largo plazo para las zonas rurales de la UE, horizonte 2040.
Con ese fin acaba de abrir una consulta pública. Quiere recoger opiniones sobre los retos y oportunidades de estas áreas, sus aspiraciones de cara al año 2040 y las acciones que habría que llevar a cabo para lograrlas. La consulta está abierta hasta el 30 de noviembre a todos los que quieran participar: agricultores, pequeñas y medianas empresas rurales, Estados miembros, autoridades regionales y locales, organizaciones de la sociedad civil, jóvenes rurales, ONG,…
Esta consulta es un primer paso de cara a la presentación, por parte de la Comisión Europea, de una Comunicación sobre este asunto, que se espera para mediados de 2021. La Comunicación busca centrar el debate comunitario sobre el futuro de las áreas rurales y el lugar que deben ocupar en nuestra sociedad. Propondrá acciones, también a corto plazo, para lograr los objetivos que se establezcan para el largo plazo.
La Comisión considera que para completar esta visión hace falta evaluar cómo es la vida en las zonas rurales y determinar qué hay que hacer para favorecer su prosperidad. Para participar en la consulta hay que rellenar un cuestionario que, entre otras cosas, busca conocer cuáles son las necesidades de las zonas rurales hoy, cuáles son sus atractivos, qué oportunidades presentan de cara al futuro,… Además, el cuestionario incluye también una serie de preguntas sobre la PAC.
Según datos de Bruselas, las zonas rurales ocupan el 45% del territorio de la UE y en ellas viven 96 millones de personas. Esas áreas “pueden desempeñar un papel especial en la transición a una Europa verde y sostenible, mitigando el cambio climático, proporcionando alternativas a los combustibles fósiles y desarrollando la economía circular. Además, la crisis del Covid-19 puede provocar cambios significativos en la sociedad de los que podrían beneficiarse las áreas rurales”. Al mismo tiempo, añade la Comisión, tienen que afrontar “retos específicos, relacionados principalmente con la lejanía: el acceso a servicios públicos y sanitarios, la conectividad, la educación, la pérdida de jóvenes”.
Al cuestionario puede accederse a través de este enlace.